
- Sé algo perfectamente bien. Sé que aunque lo intente una y otra vez nunca
podré hacerte feliz de la misma manera que lo hacen los demás. No me
veo contándote a lo que los humanos llaman "chistes". Creo que aun me
queda mucho para saber si quieres realmente un peluche o no. Si quieres
que te lleve a cenar, a pasear, a bailar... Y sin embargo se que eso
tampoco lo haría cualquiera. Otro te llevaría al cine. Otro pasaría las
tardes entera contigo viendo una película, abrazado a ti. Otro haría
cosas contigo tan fáciles como pasear al perro y comer pipas. Pero me he
dado cuenta de que yo no puedo hacerte feliz de esa forma. Y me empieza
a desesperar el hecho de no poder encontrar "Mi Forma". Y sin
embargo... ¿No suena bien, que a la misma vez egoísta? La forma en la
que yo puedo hacerte feliz es algo más dificil a la de los demás, pero
también es única. Quisiera demostrarte que tú también eres única.
Quisiera poder decirte más a menudo lo mucho que te quiero. Quisiera...
Poder abrazarte y besarte ahora.... Quisiera poder tener esos impulsos
que tiene la gente normal para hacerte entender que es lo que eres para
mí.... ¿Y por qué no?
El chico tiró de su muñeca la que había cogido
antes, haciéndole chocar contra su pecho. Y allí subió la otra mano a su
mentón, acariciándoselo con suavidad. Para acercar su rostro al de
ella, y allí...
- ¿Por qué no decirte aquí y ahora que te quiero?...¿Por
qué no demostrártelo?.....
Y entonces, la besó.
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